Ayer se celebró en muchos
lugares el día del amor y la amistad, el día San Valentín. Para muchos fue una odisea el hacer los
preparativos para poder agradar a la persona amada, o por la persona que
quieren se de cuenta que tienen un afecto especial por ella. Corrieron por varios lugares buscando la
tarjeta perfecta, el ramo de flores perfecto, la caja de chocolates perfecta,
el anillo perfecto, en fin, cualquier obsequió que les ayudara a demostrar ese
amor tan grande que tienen por esa persona.
Yo no corrí mucho, no porque no
ame a mi esposa y a mis hijos, los amo con todo
mi corazón y trato de decírselos cada que tengo una oportunidad. Pero no corrí porque lo celebramos de una
manera más tranquila, más típico guatemalteco, así que hice la cena con
huevitos revueltos, frijoles volteados, tortillas y café para mí.
La pasamos muy bien junto con
unos amigos que llevaron pan para el cafecito y llegaron con toda su
familia.
Pero ayer por la mañana hice una
publicación en mis redes sociales donde coloque esta frase: “El amor no es un
día, El amor es Dios. Si tengo amor en
mi corazón podré vivir en amor y compartir ese amor con los demás”.
No celebremos solo un día del
amor, vivamos en amor, demostremos amor; Jesús nos dijo que debemos amar a Dios
con todo lo que nosotros somos, pero además que debemos amar a nuestro prójimo
como a nosotros mismos.
Te cuento que tu prójimo también
son tus padres y tus hermanos, y si estas casad@ tu pareja y tus hijos son tu
prójimo, pero a esos cuesta más amarlos porque paso con ellos todos los días,
además me tienen que aguantar porque yo así soy, yo se que no es tarea fácil.
Pero te animo a que vivamos en
ese amor que Dios nos pide por medio de su palabra y de su hijo Jesús, vivamos
nuestra vida segundo a segundo disfrutándola pero también aprendiendo de cada
vivencia y compartiendo con otros lo aprendido para poder cambiar nuestro
entorno. Empecemos en nuestra casa,
amemos a nuestra familia y que otros puedan ver la manera en que vivimos y
deseen imitarnos.
Dios es amor por lo tanto debo vivir demostrando que tengo ese amor todos los días con todas las personas. No es fácil pero debo ser intencional en hacerlo cada día.
"Hay tres cosas que son
permanentes: la confianza en Dios, la seguridad de que él cumplirá sus promesas,
y el amor. De estas tres cosas, la más
importante es el amor." 1 Corintios 13:13
TLA
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